Memorias de El Hombre de la Puerta de Atrás (III)
21.- Piensa que ellas te prometerán la luna, creen sentirse enamoradas. Mentira, solo quieren follar, eres como un chocolate sustitutivo.
22.- Después sienten remordimiento y te piden amablemente que olvides lo que pasó. Otras, simplemente te borran de un plumazo.
23.- Pero no te confundas, mientras estés con ellas serás su objeto sexual y se mostrarán cariñosas como si llevarais juntos veinte años enamorados.
24.- Poco a poco, su vida anterior se desintegra para convertirse en una sola razón: la puerta de atrás.
25.- La adicción es total. Cada vez intentas el más difícil todavía. Escalón superado, muesca nueva en el revólver.
26.- Ya no hay vuelta atrás, dependes en exclusiva de mujeres prohibidas la ética, por los principios creados para ser violados por los hombres.
27.- Pero no puedes sentirte culpable. Ellas son las que te buscan unas y caes en su tersa tela de araña. Tú eres quien se lo puede permitir.
28.- Esto no va a durar toda la vida. El corazón del hombre de la puerta de atrás se va vaciando, y saltan las alarmas de la soledad.
29.- La duda estriba ahora en que lleva toda una vida entrando y saliendo sin ser visto. Quién le dice a él que no va a sufrir el mismo trato.
30.- Lo que los hombres han hecho toda la vida, fantasmeando muchas veces, ellas lo multiplican por dos bien calladitas.
0 Response to "Memorias de El Hombre de la Puerta de Atrás (III)"
Publicar un comentario